RINCÓN POR RINCÓN: LEÓN

RINCÓN POR RINCÓN:  LEÓN
La catedrál y al fondo montes nevados

7 ene 2017

CRÓNICA DE UNA TEMPORADA (ÚLTIMO CAPÍTULO)

Capítulo Tercero (último):


Después del campeonato de España me tomé una semana sabática que acabaron siendo dos debido a una gripe. Seguí con los entrenamientos técnicos. Todavía no controlaba mi cuerpo al hacer series muy rápidas pero había progresado.

Hasta el 13 de mayo no era la próxima competición, el Autonómico se acercaba pero un fin de semana que fuimos hasta la montaña me puse bastante malo y lo estuve hasta la semana anterior al autonómico. No tenía esperanzas de quedar más adelante del tercer puesto. Llegó el día de la competición y yo no tenía buenas sensaciones. Calenté con Dani, y después confirmamos y nos dirigimos a la pista. Al salir me puse en medio del grupo y dejé que Jony y “Willy” se fueran porque pensé que no aguantaría ese ritmo. La carrera siguió así hasta el final y acabé tercero con un tiempo de veintisiete y pico. Sentí que no lo había dado todo y que debía haber intentado ir con los de adelante.

El once de junio era el intercomunidades. Iba porque hubo quien hizo un “chanchullo” en el que el perjudicado fue Dani. En estos días me habían indicado que tenía que revalidar en pista la marca para el campeonato de España. Paco me había dicho que fuera marcando un ritmo determinado y que hiciera más rápido el último mil. Al salir Jony y “Willy” salieron por debajo de cinco el mil. Yo hice el mil unos doce segundos por debajo del tiempo estipulado. Joni había dejado a “Willy” al cual yo había pillado y dejado atrás mientras que este primero me sacaba unos cien metros. En los tres kilómetros de en medio bajé el ritmo pero iba recortando metros al primero. En el último kilómetro cambié y cuando quedaba una vuelta pillé a Jony y le dejé sin ningún problema. Me hizo ilusión ganar porque fue la primera victoria de la temporada en cinco kilómetros y había demostrado quién era el mejor. Paco me dijo que si hubiera ido a los ritmos que me marcó habría hecho la mínima, pero yo no estoy de acuerdo con eso.

Los días siguientes seguí entrenando como si fuera a ir al campeonato de España. A finales de junio hice un cinco mil a ritmo de competición para intentar hacer la mínima pero no lo conseguí.

Estuve esperando hasta el miércoles de esa misma semana del campeonato en el que se me comunicó que si asistiría a este. El viernes por la mañana salió el autobús. Yo competía el sábado por la tarde. Llegamos por la noche a la hora de cenar. El sábado por la mañana salí a entrenar suave. Los entrenamientos de la última semana me habían salido fatal por lo que no tenía ni idea de cómo me iba a salir la carrera. Eso sí, estaba dispuesto a luchar hasta el final y no hacer como en otras carreras en las que, cuando me cansaba ya estaba deseando acabar. Antes de la carrera bebí mucha agua. Cuando llegó Paco me puse a calentar. Entramos a la pista hice unos cambios e intenté relajarme todo lo que pude (aunque no estaba nervioso). Nada más empezar la carrera se dividió en dos grupos. Llovía atrás del segundo grupo, pero como iba muy cómodo cambé y me puse en el primer grupo. Aguanté un kilómetro o algo más y me fui quedando poco a poco, pero yo seguía luchando, no pensaba en cuanto me quedaba para acabar sino en cómo iba, a cuanto estaba el de delante o el de detrás. Más adelante me pilló el de Playas de Castellón. Estuve con el hasta que quedaba un poco más de una vuelta que cambié porque el de detrás se estaba acercando y si nos pillaba ya seríamos tres para jugarnos la sexta posición. Dejé atrás a mi rival y en los últimos cien metros ya fui a tope. Acabé haciendo 25’39’’ por lo que estaba muy contento. Para mí había sido la mejor carrera de mi vida.

P.D. Perdón por el retraso.
P.D. Se admiten reclamaciones.

FIN.