RINCÓN POR RINCÓN: LEÓN

RINCÓN POR RINCÓN:  LEÓN
La catedrál y al fondo montes nevados

29 ene 2024

G L O B A L


Globalizar: Incorporar datos, hechos u o otras cosas en un planteamiento global.

Individualismo: Tendencia a pensar y actuar con independencia de los demás sin sujetarse a ninguna norma.

Único: Solo y sin otro de su especie.

Pensamiento único: Aquél que se sostiene a sí mismo constituyendo una unidad lógica independiente, sin tener que hacer referencia a otros componentes de un sistema de pensamiento.


Existe una frase conocida de Carl Gustav Jung que viene de perlas al tema que vamos a tratar: “Todos nacemos originales y morimos copias”. De lo que podríamos deducir que es justo ese instaurado pensamiento único, global o individual el que consigue hacer desaparecer aquellos valores inherentes al ser humano, como la libertad, la creatividad, la capacidad de crítica, volviéndonos adictos a las normas, decretos o propagandas que seguiremos ciegamente sin emitir ningún juicio de valor sobre las mismas.


Ignacio Ramonet, lo define como “una especie de doctrina viscosas que, insensiblemente envuelve cualquier razonamiento rebelde, lo inhibe, o perturba, lo paraliza y acaba por ahogarlo”.


Noam Chomsky, nos podría dar una interesante lección respecto al control de las masas, sobre como influir sobre la opinión pública, sobre como a través de los diversos medios de comunicación, nos hacen creer que todo el mundo piensa igual y que aquellos que no lo hacen así, deben ser marginados de la sociedad.


Eduardo Galeano siempre tan práctico, nos dice lo siguiente: “debemos buscar cauces para enfrentarnos a los problemas que queremos cambiar, quizá algunos de ellos serán muy difícil cambiarlos, pero creo que nunca nos sentiremos más defraudados con nosotros mismos como en el momento en el cual decidamos no embarcarnos en aquello que creamos por miedo a no conseguirlo y dejemos pasar la oportunidad”.


Desde la guerra del golfo, o tal vez antes, algunos se han dado cuenta de que las cosas en riguroso directo, sobre todo si las vendemos como terribles (a veces lo son efectivamente), influyen muchísimo más en las mentes de la ciudadanía.


Otro ilustre como Jose Luis Sampedro, seguramente haría alusión a globalizadores (unos pocos) y globalizados (el resto de la humanidad). En términos económicos, tal vez nos describiría como con la globalización los más ricos aumentan su riqueza y los más pobres terminan perdiendo hasta los mocos.


La globalización nos salvará, porque nos volverá iguales a todos pensó algún ingenuo, y quien sabe si algún botarate metido a político en algún momento se abonaría a esta misma línea de pensamiento.


Creo que con estas pinceladas es más que suficiente para comprender como una vez más nos han vendido la moto y como el dinero está y estará siempre tras los grandes cambios, ya que solamente aquellos que tienen enormes recursos, tienen la capacidad y el interés por transformar la sociedad a su antojo para estrujarla hasta las últimas consecuencias sin importar los métodos, los heridos o los millones de muertos.


Y si no me creen, observen, piensen, analicen, escudriñen pero sobre todo sean ustedes mismos y no esos peleles que terminan siendo cómplices y complacientes con sus amos.

16 ene 2024

Las Analectas

 

“El Maestro Zeng dijo: «Cuando se honra a los muertos y se mantiene viva la memoria de los antepasados remotos, la virtud de un pueblo se halla en su plenitud».”

Mucho tenemos que aprender de los antiguos; no tienen que ser precisamente personajes ilustres; un campesino cualquiera de no hace tanto, (aún quedan algunos) nos podría enseñar mucho de la vida y por supuesto de la muerte que ya es un acto puramente comercial, que forma parte junto con los últimos periodos en la vida del ser humano de una economía descarnada en la que las personas forman parte de un balance contable, y arrojadas al debe o al haber según convenga a las finanzas.

Poca virtud le queda ya a los pueblos; nuestros políticos por un lado y ciertas instituciones a veces en la sombra por el otro, se han ocupado desde hace décadas o tal vez siglos de moldear las costumbres de las naciones a su antojo de modo que si cae alguna moneda siempre lo haga por el lado donde ellos ponen el saco.

Estamos ya habituados aunque la gran parte de la ciudadanía lo ignore o no quiera saberlo, a que empresas multinacionales que tienen entre sus clientes tanto a otras empresas, como a los propios gobiernos hagan y deshagan a nivel comercial con tratados que tal vez sea por casualidad; siempre les benefician, al tiempo que por supuesto perjudican al resto. Pues bien, ese resto somos nosotros, los ciudadanos del mundo sometidos al embudo de la globalización que tanto provecho nos debería haber aportado.

Lo mismo aparcan con sus bártulos en países subdesarrollados, como en los más ricos, pues para ellos las naciones son como el gocho; ese animal del que todo se aprovecha. De ese modo tienen la capacidad a causa del miserable sometimiento de los gobernantes de aplicar sus propias normas, evitando leyes y constituciones, como quien se quita un pelo de la chaqueta.

Lo de las emociones y los sentimientos hacia los seres humanos es contraproducente en esos ámbitos; de modo que si tienen que echar de su vivienda a unos ancianos que quedarán irremisiblemente en la calle, no lo dudan y si tienen que arruinar a un país entero para meter sus garras en aquellos sectores que generen beneficios, por supuesto que no lo dudan en absoluto, pues la contabilidad es lo primero y si no hay reparto de beneficios no mola.

Para llegar a la consecución de sus objetivos, no dudan en comprar a quien sea necesario, y tan bien lo han hecho, que han convertido la política en un estercolero más grande aún del que ya había. Aparecen entonces las famosas puertas giratorias que con el tiempo y el consentimiento de los gobernantes de turno funciona en ambos sentidos; de ese modo podemos contemplar como habitual que por ejemplo un alto cargo de la industria armamentística, sea nombrado ministro de defensa, circunstancia que aprovechará para beneficiar a la empresa de donde provenía, y al finalizar su mandato volverá con un mejor sueldo aún a su antiguo puesto o si lo hubiere a uno mejor.

Por citarlo más veces no se convertirá en una verdad absoluta; pero verdad es al fin y al cabo; me refiero a todos esos organismos, que comienzan con “organización” por ejemplo la organización de las naciones unidas, la organización mundial del comercio o de la salud; o bien otras como la fao, el fmi, la cee, el mercado común, banco central o mundial y una multitud de siglas que despistan y que a veces dan la impresión de no pertenecer al negocio privado, cuyos fines parecen encaminados a resolver los problemas del mundo, cuando en realidad los agravan.

Tal vez exagero, pero a poco que observemos las acciones de organismos como la onu, la fao, o el fmi podremos sin duda aseverar que no nos interesan lo más mínimo, ya que la paz ni se la ve ni se la espera, lo mismo que la erradicación del hambre o de la pobreza. Al contrario, cada vez tenemos más guerras que se pasan a esos organismos por el forro; más muertos por falta de alimento y más familias sin lo mínimo para llegar a mitad de mes. Por lo tanto, sin duda alguna estaríamos mucho mejor invirtiendo en empresas ciertamente con menos abogados, menos competitivas y cero globalistas, pero de calado local sobre las que tendríamos al menos cierta capacidad de control

S I N O N I M O S

 

Atrocidad, brutalidad, barbaridad, salvajada, bestialidad, crueldad, animalada... son palabras con idéntico significado que podemos emplear en diferentes frases; pero cuando confluyen en multitud de artículos de opinión, es que el asunto en cuestión indica que alguien se está pasando de la raya, o dicho de otra forma, que están traspasando todas las “fronteras” de lo imaginable; pero dejemos que se expresen otros:

Otro mundo es posible:

Oxfam Intermón calcula que el número promedio de muertes por día en Gaza es significativamente mayor que el de cualquier conflicto armado importante reciente, incluidos Siria (96,5 muertes por día), Sudán (51,6), Irak (50,8), Ucrania (43,9) Afganistán ( 23,8) y Yemen (15,8).”

El periódico.com

Balance de víctimas en Gaza”

“Un total de 24.100 palestinos han muerto y 60.834 han resultado heridos en los ataques israelíes en Gaza desde el 7 de octubre...”

As.com:

“Guerra en oriente medio, en directo; situación “infernal” en Gaza”. (Aquí aparece en mi opinión un eufemismo, que se repite en varios medios, porque yo creo que la palabra guerra no se ajusta a lo que sucede allí)

BBC NEWS MUNDO

“La mayor parte de la población de Gaza, de 2,2 millones de personas, está desplazada internamente y la ONU ha advertido que la mitad de la población corre riesgo de morir de hambre.”

"La muerte masiva, la destrucción, el desplazamiento, el hambre, las pérdidas y el dolor de los últimos 100 días están manchando nuestra humanidad compartida", dijo en un comunicado Philippe Lazzarini, comisionado general de la agencia de la ONU responsable de los refugiados palestinos UNRWA.”

CNN:

Se trata de un mínimo fragmento de una entrevista realizada por Sheena McKenzie a un médico palestino bien conocido por los medios:

Esta vez, más de 20 miembros de la familia de Abuelaish murieron tras un ataque aéreo contra el campo de refugiados de Jabalia a finales de octubre. (Las Fuerzas de Defensa de Israel afirman que el ataque iba dirigido contra miembros de Hamas).

Podríamos llenar un libro solo con breves comentarios de diferentes medios al respecto; pero hay que destacar que la población no solo está muriendo por las bombas o los disparos, sino que está prácticamente asediada o tal vez deberíamos decir que se encuentra en un “gueto”, (¿les suena de algo?) donde se les obliga a vivir encerrados, donde se les obliga a trasladarse y donde se les invita a morir de hambre. Supongo que no seré el único que se lo pregunte, ¿qué será de los niños que tengan la “suerte” de sobrevivir a esta invasión?.

Por cierto, ¿no es la onu, ese organismo encargado de mantener la paz en el mundo?. Pues menudo papelón.


12 ene 2024

EL PATINETE

Me se (o era se me) pone una sonrisa boba sin querer al leer una de las noticias del día. Algún empresario espabilado propone que los patinetes pasen la “itv” como ya lo hacen otros vehículos, sin que en mi opinión hayamos visto un beneficio importante de esta gestión en las carreteras durante estos años; salvo tartanas en estado comatoso, que haberlas haylas aunque no creo que aguanten un solo día a la inspección de la guardia civil. 

Yo, que cuento con algunas amistades entre el gremio, he podido descubrir que los que son buenos y no hablo ya de los extraordinarios, son capaces de ver si has pisado la línea continua a distancias donde yo casi no vería ni las ruedas de un camión. En un viaje con uno de ellos, aprendí a mirar lejos después de comprobar como me iba cantando los coches que aparecerían en las diferentes curvas por las que transitábamos antes de que los pudiera ver yo, !menudo ojo el suyo¡. 

Pero a lo que íbamos, que era la noticia esa que me ha dejado estupefacto (osea, pasmado), porque uno que a veces la da a la mollera hasta sin querer, se pone a elucubrar (aunque en este caso concreto, con fundamento), y se pregunta para cuando una inspección para las zapatillas de andar por casa, que si las sacas a la calle con la helada te puedes pegar un hostión de mucho cuidado, y quien sabe si en algún caso podrías terminar con las piernas sobrevolando la acera y asomando peligrosamente a la calzada. 

Luego, por otro lado, pienso que no me extraña ni gota esta situación; porque la llevamos soportando siglos, desde el primer negociante que para sustraerle las habichuelas a su vecino, se inventó, vaya usted a saber el qué. 

Hoy día te compras un coche y pagas mil veces por mil motivos diferentes, y luego si lo quieres vender de nuevo a pagar; claro que la cosa no se queda ahí y ahora con el invento de los publicitados eléctricos (esos que al parecer arden de vez en cuando), nos vienen advirtiendo de que con tu buga que te costó diez años de letras más lo que te prestó la tía María, ya no puedes circular por el centro de tu ciudad, y que dentro de nada, ni por el centro ni por los prados; de modo que aún sin una demostración palpable de que sean más beneficiosos estos que aquellos o lo tomas o te vas a tomar por ese sitio. 

Lo del invento del calentamiento global, se les fue patas abajo, porque que me digan a mí como se come entonces lo de la pelona de ayer mismo en un pueblo de Babia (-17.4º). Pero como esa gentucilla es más lista que el hambre, ahora le llaman cambio climático y en eso si que están acertados, porque es lo que viene sucediendo desde el comienzo de los tiempos. Yo no se como se las apañan, pero cogen algo que es nuestro, nos lo cobran y al final se lo quedan. 

Lo del pastilleo y el picoteo es ya la repanocha, y ahí si que se mueve una pasta gansa, pero de esto mejor no digo ni pum, no sea que me envíen un vion de esos que fumigan hasta en las bodas. 

Lo del aire sí que tiene más enjundia que lo del patinete, porque uno puede llegar a comprender que las cosas valen dinero, que los impuestos son para mejorar la vida de los ciudadanos y en ningún caso para enriquecer al político oportunista de turno y a sus amos, de modo que de acuerdo, pagamos por el agua, pagamos por la electricidad e incluso pagamos a las multinacionales porque...bueno... en realidad no se a estos a cuento de qué les pagamos; pero pagar por el aire que respiramos o como se está poniendo de moda por el que expulsamos ya es de “apaga y vámonos”. 

Resulta que tras siglos y siglos respirando en este planeta a pleno pulmón, viene más de esos “listos” con el cuento de que estamos jodiendo el planeta por respirar, y así como te lo digo que hasta a mí me cuesta creerlo, y mira tú por donde, ya nos cobran por unas supuestas emisiones de carbono las cuales por lo visto se venden y se compran (país rico – país pobre), y ahí si que entran muchas de esas “trans” usease, aquellas que limpian lo mismo tu casa que la de tu vecino que vive a diez mil kilómetros. 

Pues ahora que la cosa va cogiendo marcha, y para rematar la faena, ya están pensando en puntuar al ciudadano de a pie; y al que le pite el aparato, queda castigado a no salir de casa en una semana ,en un mes, en un año o en la puta vida... Vaya usted a saber.