ENRIQUE
ROJAS, EL MEJOR ENTRENADOR PERSONAL
En estos tiempos en que CUALQUIERA parece estar preparado para ponerse a los mandos de un grupo de entrenamiento, sin saber muy bien de que va la cosa; en que fulano o zutano se sienten capacitados para poner planes a diestro y siniestro, y fabricar campeones; en estos tiempos en que muchos hablan y tan pocos saben, yo me pido a Enrique Rojas.
Hay una tal Blanca
Torquemada, columnista en un conocido diario nacional, que hace una
extensa entrevista a este conocido siquiatra, y ensayista; que para
gente que está inmersa en esto del “mundo del deporte” tiene en
mi modesta opinión un gran interés.
En realidad la entrevista
gira en torno a un libro “No te rindas”; libro que no voy a leer,
porque sería como leer algunos de mis propios pensamientos, en el
cual el autor piensa más en la pequeña y mediana empresa que en el
deporte, pero me van a permitir arrimar el ascua a mi sardina.
Hay un atleta en especial
que recordará una frase muy similar a esta “a
partir de ahora, nuestro objetivo será aprender a perder”,
puede sonar un poco extraño de boca de un entrenador, máxime cuando
hablamos de un atleta con un buen nivel; pero en opinión del
entrenador, “aprender a perder” era más importante que “seguir
ganando”.
La explicación va en el
sentido de asumir la victoria es fácil, no solo para el atleta, sino
para todo su entorno; el problema viene cuando tras los sucesivos
“que grande eres”, el deportista sufre poco a poco una
transformación, que en muchas ocasiones le lleva del disfrute al
sufrimiento sin que ni el mismo sepa la causa. Esto no solo ocurre
con atletas que comienzan a ganar a una edad temprana (aunque es más
probable), sino con atletas de edades avanzadas, los cuales en su
devenir deportivo no cuentan con la experiencia inestimable de alguna
derrota.
Dice el amigo Rojas en el citado
artículo frases como estas:
“Lo que
enseña la derrota no lo enseña el éxito”
“La derrota te
enseña a seguir luchando y a no creerte nada. No hay quien pueda con
alguien que ha superado derrotas importantes”.
“La felicidad
es para mi un estado de ánimo, un estar contento con uno mismo”
“Y no depende
(la felicidad) de la realidad, sino de la interpretación de la
realidad que tu haces”
Pero si hay una frase en todo el
artículo que me ha llamado especialmente la atención, sobre todo
porque llevo practicando eso mismo muchos años, es la que viene a
continuación y que he querido dejar para el final, la frase es la
siguiente:
“NO
HAY QUE ENTRENAR A LA PERSONA PARA EL ÉXITO,
SINO
PARA EL ESFUERZO”.