Ha habido un poco de todo en esta carrera, pero en lo que a mí respecta, me he demostrado a mí mismo que mi afinidad con la cámara de fotos está aún muy lejos de llegar, de modo que me he puesto a borrar una tras otra, hasta que he llegado al momento álgido de la competición; ese lado humano que afortunadamente aún pervive en los corazones de muchos corredores, que utilizan este esfuerzo extra para aportar energía a sus mentes, pero que saben diferenciar entre el postureo y la realidad.
A falta de menos de tres kilómetros para finalizar ha habido un percance grave, que lo pudo haber sido mucho más de no haber sido por la pronta intervención de dos corredores que mientras llegaba la ayuda, desesperados hacían todo lo que podían por mantener con vida e intentar reanimar al compañero corredor que se encontraron tumbado en la calzada.
La ayuda tardó en llegar algo más de lo necesario; son cosas que ocurren a menudo y para las cuales al parecer aún no estamos lo suficientemente preparados.
Eran los dorsales 103 y 104, dos colegas de equipo solidarios hasta la médula que dieron una muestra más de que como seres humanos aún tenemos posibilidades de no enviar este mundo a la mismísima mierda.
Como simple observador, quiero darles las gracias porque ese acto que espero haya servido para salvar una vida, y para tenerlo presente en sucesivos eventos; no siempre se produce de tan ensimismados como estamos en nuestro propio ombligo gracias a tanta cultura televisiva como nos arrojan por las pantallas y los medios en todo el mundo.
Hay fotos que reflejan alegría, otras dolor, y algunas TENSIÓN, estos chicos lo pasaron mal mientras esperaban una ayuda que se retrasaba unos minutos que podrían ser la diferencia entre la vida y la muerte.
Para mí las fotos de hoy tienen un sabor amargo y aunque solo había pensado dejar aquí media docena, al final he rescatado unas pocas más (muy pocas).
De modo que los que quieran verse retratados es mejor que visiten el blog de este paisano:
https://blaslavigne.blogspot.com/2021/06/trail-zapallobos-2021.html
Por último, gracias a mis nuevas amigas de Tremor por la agradable charla.
Y como algunas las había prometido, aquí dejo unas pocas más de mi cosecha:
